5 razones por las que #YogaRestaurativo te va encantar.
- Nallely Cáceres
- 13 may 2017
- 3 Min. de lectura

La vida cotidiana está llena de retos que nos demandan mucha energía física, mental y emocional. Vamos por ahí cumpliendo con el exterior y pocas veces nos damos tiempo para conectar con nuestro interior. Dejamos que nuestros pensamientos se descarrilen, nuestras emociones se disparen y terminamos ignorando nuestro cuerpo y más aún, nuestra voz interna. Todo esto pasa sin que nos demos cuenta, hasta que, la falta de estas revisiones/conexiones periódicas, nos cobra factura con su moneda de cambio: el estrés.
Así pues, ahora tengo para ti un lista de razones por las que Yoga Restaurativo puede ser una solución para contrarestar los efectos de este mal de nuestros tiempos, pues representa una práctica íntima y gentil en la que podrás:
1. Conectar.
El uso de props (como cojines, bloques, cinturones, cobijas, entre otros) te ayuda a sostener una postura por mucho tiempo; durante el cual, debes estar completamente relajado y suelto, con el objetivo de obtener el mayor beneficio de la práctica. Para ésto, es necesario que tu mente esté calmada y en profunda conexión con tu cuerpo. Cuando llegas a ese estado, automáticamente te invade una sensación de bienestar que no podrás ignorar; esa es la famosa “conexión” que estamos buscando todos los practicates de Yoga.

2. Abrir espacios para limpiar y restaurar tu cuerpo·mente.
Con la guía y los ajustes correctos, los instructores te hacemos profundizar en el proceso de la postura y esto te permite entender que en la medida en la que tu cuerpo se abre, se abren músculos, tejidos nerviosos, articulaciones, tendones, etc… la energía vital (prana), puede llegar más profundo en tu cuerpo para limpiarlo y restaurarlo. Cuando la mente está involucrada en esto, deja de seguir tejiendo pensamientos sin ton ni son y comienza a experimentar el presente, limpiándose de muchos pensamientos inútiles que rondan por ahí.

3. Ejercitarte sin importar tu nivel físico.
Muchas veces cuando pensamos en Yoga, se nos viene a la cabeza una mujer jóven, atlética y en posturas complejas. Pues ¿qué crees? eso no es más que un estereotipo que sólo representa a un sector de los practicantes de esta Disciplina. En este estilo en particular, no importa si eres, hombre o mujer, un súper atleta o muy apenas mueves tu cuerpo para lo básico; Yoga restaurativo es incluyente, lo que quiere decir que aquí todos los cuerpos gozan de los beneficio de esta práctica, puesto que esta no es físicamente intensa, y que, gracias al soporte de los props puedes sostener una postura por mucho tiempo, esto conlleva un trabajo interno profundo, cuyo esfuerzo radica en mantenernos calmados y centrados en la experiencia, sentipensando el cuerpo.
¿A poco no suena rico?

4. Reprogramar el diálogo interno.
Durante mis clases hago énfasis en que el diálogo interno, debe ser amoroso y constructivo. Con ésto, busco crear un espacio libre de juicios en la práctica. Una tregua con el criticón interno que todos llevamos dentro. Preparando así la tierra fértil para sembrar semillas de paz interior y amor propio que florezcan con la constancia y la presencia plena y respetuosa en nuestra alineación, mente, cuerpo y emociones.
Además, te aseguro que al final, terminas agradeciendo haberte dado a tí mismo ese profundo y gentil apapacho.

5. No pierdes nada intentándolo.
Como todo en esta vida, hay cosas que te funcionan y cosas que no. Yo te recomiendo intentar este estilo y decidir qué tal te va. Pero que sea tu conocimiento el que te guié y no los prejuicios, los miedos y la desidia. Al final, lo que te queda es la experiencia y ya tu sabrás si la quieres repetir esporádicamente, incluirla en tu estilo de vida cotidiano o si de plano no es lo tuyo, al menos ya lo sabes de cierto.
¡Así es que no esperes más, busca una clase de Yoga restaurativo e inténtalo!